PARTE INTEGRANTE DE MI PSICOTERAPEUTA Y YO
CAPITULO 4
-¿Qué tal te encuentras hoy de humor?
-Hoy estoy fatal… Mi humor hoy está en números rojos. Peor que la prima de riesgo.
-Si esta así, la cosa es grave.
-Sí. Estoy de mal humor pues.
-¿No quieres contármelo?
-No. Solo quiero llorar.
-Pues hazlo. Si así te vas a sentir mejor.
-Gracias, pero ya he llorado antes de venir… Y ayer… Y antes de ayer… Y el otro… Y el otro… Y …
-Vale, vale. Veo que has llorado mucho.
-Sí…. Mucho.
-¿Qué te pasó para que lloraras tanto? Si puede saberse.
-No. No puede saberse. Solo lo puedo saber yo.
-Ahhh…Es lo que llamamos un secreto.
-Pues sí. Es un secreto. Es mi secreto.
-Hay secretos, que de alguna forma, cuando los cuentas, aunque sigan siendo secretos, ya no son tan terribles. Sepas que de aquí, no va a salir nada de lo que me cuentes.
-Ya, pero no. Es mi secreto. Prefiero no compartirlo. Es mejor dejarlo ahí y que siga siendo secreto.
-Comprendo que quieras atesorar tu secreto. Pero no entiendo que si tu secreto te hace daño, sigas por esa línea.
-Ya…Pero es que… Es complicado, es difícil de llevar, de digerir, es fatigoso.
-Sigue.
-Hay días en que lo llevo bien. Me siento llenita. Hay otros en que lo llevo fatal, y pienso… ¿Por qué no has dado un paso atrás? ¿Por qué?
-¿Por qué no diste ese paso atrás?
-Al principio lo di.
-Pero…
-Pero… Pues eso. La curiosidad,… “La curiosidad mató al gato”… Jajaja.
-Entonces, dices que eres curiosa.
-Sí…. Lo admito. Soy muy curiosa.
-Existe lo que llamamos Curiosidad abstracta.
-¿Y eso que es?
-Los seres humanos al igual que los animales, son considerados muy curiosos.
Lo que sucede es que la combinación de esta curiosidad, con la capacidad de pensar de una forma o manera abstracta, conducen a la fantasía y a la imaginación, dirigiendo a una forma especialmente humana del pensamiento “razón humana”, de forma abstracta y consciente.
-Bufffgg… Y ¿Es grave eso?
-No. Para nada.
Solo tienes que dosificar la cantidad justa de curiosidad e imaginación.
-Ya.
-Si.
-Yo es que de imaginación, tengo un rato largo.
-Me alegro por ti. Eso no te hará ningún daño. Estate tranquila.
-Vale.
-Bien.
–La verdad es que ahora mismo, me siento más tranquila.
-¿Lo dejamos por hoy?
-Sí. Lo dejamos.
-Que tengas buenas tardes.
-Idem.
CAPITULO 5 :
5ª.- Sesión con mi psicoterapeuta
Si no lo digo Reviento
fotomontaje amparoperezortola